El miedo es una emoción normal. Todos tenemos miedo.
Lo que sucede es que hay miedos llevables, y otros que nos paralizan. Esto segundo es lo problemático. En este artículo vas a poder conocer los principales miedos… y el que está a la base de todos ellos.
Te cuento 😉
¿Cuáles son los miedos más comunes?
Paso ahora a contarte los miedos más comunes que tenemos las personas y que más a menudo vemos en nuestro centro Integrativa.
1. Miedo a la muerte
Este es obvio y está conectado con otros miedos como el miedo a las alturas, a los aviones etc.
2. Pérdida de autonomía
Desde el miedo a ser por ejemplo encerrados llegando a la pérdida de autonomía en pareja.
3. La soledad.
A ser dejado de lado o a ser considerados como una persona no querida.
4. Miedo a la mutilación.
Relativo a nuestra integridad física o respecto a alguna parte de nuestro cuerpo.
5. Daños y perjuicios al ego.
El miedo a sentir humillación, como buen ejemplo estarían las diferentes formas de hablar en público.
Seguro que has ido pensado cuáles de estos miedos tienes o has tenido 😉 Es normal.
Pero que no te sorprenda tampoco si no has tenido ninguno de ellos, o sí pero en un grado muy bajito.
En mi caso, te diré que no ha habido ninguno de ellos que haya influido en mi vida de forma importante. Es cierto que como psicólogo y emprendedor me he enfrentado utilizando las tecnicas que conozco cuando he experimentado algún malestar. Por ejemplo hablando en público.
O en algún momento de soledad. Pero no es lo mismo que el miedo a la soledad. Ye te pongo aquí el ejemplo para que te des cuenta de ello.
No es lo mismo la incomodidad o tristeza de sentirse solo en un momento puntual que de tener miedo a la soledad.
¿Estoy libre de miedos? No. Pero sí de los anteriores.
Ahora presta atención a esto. Hay otro miedo… Este las personas no lo suelen expresar como tal. Pero está en el fondo de muchas acciones.
Esto lo he visto centenares de veces a lo largo de los últimos 17 años trabajando como psicoterapeuta.
Te explico.
El miedo más profundo
Durante muchos años he estado ayudando a centenares de personas a mejorar en sus miedos, ansiedad. A estimular sus emociones positivas y su autoestima desde una psicología cognitivo conductual,la psicología positiva y otras tantas herramientas.
Desde la humildad pero desde el convencimiento del trabajo bien hecho estoy muy contento de haber podido ayudar a cambiar vidas.
Pero había algo de «lo que no se había de hablar» desde esa psicología. El profesional de la psicología es objetivo. No habla casi nada de él.
Durante ese tiempo yo trataba de afrontar mis miedos y ansiedad 😉 De mejorar. De sanarme.
Por suerte, hoy día disponemos de una psicología integradora. Más amplia. Más holística. Esta psicología nos dice que:
– Eres capaz de cambiar tu pasado y de crear tu futuro
– El pasado es superable y puedes aprender de él (sabiduría)
– El futuro está lleno de infinitas posibilidades.
– Nada de lo que sucedió va a influirte a menos que lo permitas.
– Para que sea así, debes de trabajar en los procesos inconscientes que te limitan.
Recuerda lo que te decía arriba. Tras diez años recibiendo personas en la consulta y en mi propio proceso de cambio he llegado a esta conclusión rotunda que te hago llegar directamente:
Nuestro miedo más profundo es a brillar. Es a ser quienes realmente somos. A mostrarnos al mundo como tal.
Quizá lo primero que hayas pensado en que esá genial brillar. Lo que pasa es que brillar implica responsabilidad. Hacerse cargo de los propios dones y ponerlos a funcionar.
Piensa en el ejemplo de persona notable que quieras. Te daré dos. Por ejemplo el dr Joe Dispenza, quien ha revolucionado la salud y el crecimiento personal. Este medita dos horas al día, escribe libros (y ya te digo que esto no es fácil), y organiza seminarios de miles de personas.
Podría estar en su consulta haciendo sesiones, tranquilito. Pero en un momento dado afrontó sus miedos a brillar. Y tomó acción.
Otro, el tenista Rafa Nadal. Es un tipo talentoso. Pero eso no le habría bastado para ganar 20 Grand Slams, los mayores torneos del tenis. Afrontó su miedo a sobresalir, a no ser uno más. A exponerse en una pista central con 15000 espectadores y a GANAR. Y trabajó cada día por darle a la pelotita más rápido, más fuerte y de forma más certera que nadie.
Si, eso da miedo. Al principio. Es a esa super luz que desprendemos a la que tenemos más miedo.
A veces no cambiamos por los beneficios secundarios de no hacerlo. Porque quizá tendríamos que afrontarnos a la vida. A madurar. A asumir nuestro poder y poner en marcha nuestros talentos.
Nos han enseñado a temerla, y la sociedad tiene muchos medios para anestesiarla.
Repasa ahora los cinco miedos que te dije al principio: soledad, muerte, mutilación etc. En el fondo… si afronto esos miedos y los supero, voy a brillar. Mucho.
Voy a ser libre.
Y voy a sacar mi propia voz.
Creo que esos miedos nos protegen de nuestra verdadera grandeza de cumplir nuestro propósito y de dejar nuesta huella.
Haz lo extra-ordinario (el extra que el ordinario no hace). El mundo cambiante de este siglo XXI lo necesita.
Antoni
pd: espero que este artículo te haya hecho reflexionar. Puedes cambiar. Si quieres hacerlo más rádpio y acompañado, contáctame, espero me cuentes algo más sobre ti y si lo deseas te explicaré las formas en que podemos ayudarte: contacta@antonimartinezpsicologo.com